UNA ALIMENTACIÓN CUIDADA Y SELECTA
Una raza única como es la del cerdo ibérico solo puede alimentarse con los mejores recursos naturales. Y para conseguir un producto tan exquisito, la dieta de los cerdos ibéricos ha de estar cuidada con esmero. ¿El resultado? ¡Un sabor lleno de matices!
El tipo de alimentación que recibe el cerdo a lo largo de su vida es, junto a la raza, uno de los dos criterios utilizados para clasificar los Jamones Ibéricos. En función de la alimentación, podemos encontrar tres tipos de Jamón Ibérico:
De Bellota: el animal, en su etapa de engorde, se alimentó de bellotas y otros recursos naturales de la dehesa.
De Cebo de Campo: el animal, en su etapa de engorde, se alimentó con piensos, constituidos fundamentalmente por cereales y leguminosas y con hierbas del campo.
De Cebo: el animal, en su etapa de engorde, se alimentó en granjas a base de piensos, constituidos fundamentalmente de cereales y leguminosas.